¿Cómo hago ejercicio de manera segura si tengo artritis?
Aprenda cómo puede hacer ejercicio de manera segura y disfrute los beneficios de hacer más actividad física con los siguientes consejos S.M.A.R.T.
- Siempre comience con poco y aumente de a poco.
- Modifique la actividad cuando los síntomas de artritis aumenten, intente mantenerse activo.
- Haga Actividades que no impliquen esforzar las articulaciones.
- Reconozca lugares que sean seguros y formas de estar activo.
- Trate las dudas con un profesional de la salud o especialista en actividad física certificado.
Siempre comience con poco y aumente de a poco.
Cuando empiece a hacer actividad física o la aumente, comience con poco y esté atento a cómo su cuerpo la tolera. En las personas con artritis el cuerpo puede tomar más tiempo para adaptarse a un nuevo nivel de actividad. Si no es una persona activa, comience con poca actividad física, por ejemplo, con 3 a 5 minutos 2 veces al día. Vaya despacio. Aumente la cantidad de a poco (como 10 minutos por vez) y dele a su cuerpo suficiente tiempo para adaptarse al nuevo nivel de actividad antes de volver a incrementarla.
Modifique la actividad cuando los síntomas de artritis aumenten, intente mantenerse activo.
Los síntomas de artritis —como el dolor, la rigidez y la fatiga— pueden ir y venir, y puede que usted tenga días buenos y días malos. Intente modificar la actividad física para poder permanecer lo más activo posible sin que empeoren sus síntomas.
Las actividades no deberían implicar esforzar las articulaciones.
Escoja actividades que no recarguen las articulaciones, como caminar, andar en bicicleta, bailar, hacer ejercicios aeróbicos en el agua. Estas actividades implican poco riesgo de causar lesiones y no tuercen ni impactan demasiado las articulaciones.
Reconozca lugares que sean seguros y formas de estar activo.
La seguridad es importante para comenzar y mantener un plan de actividad física. Si actualmente está inactivo o no está seguro de cómo comenzar su propio programa de actividad física, es posible que una clase de ejercicio sea una buena opción. Si usted planifica y maneja su propia actividad, encuentre lugares seguros donde hacerla. Por ejemplo, camine en áreas donde las aceras o senderos estén bien iluminados, tengan una superficie pareja, tengan bancos para descansar si lo necesita, estén libres de obstáculos y separados del tráfico pesado.
Trate las dudas con un profesional de la salud o especialista en ejercicio certificado.
Su médico es una buena fuente de información sobre la actividad física. Los profesionales de atención médica y los profesionales en ejercicio certificados pueden responder las preguntas que tenga sobre qué cantidad y tipos de actividad física se ajustan a su capacidad y a sus metas de salud.