2018 Brote de infecciones por E. coli vinculado a la lechuga romana B – Actualizaciones de la investigación
Actualización final
Publicada el 10 de enero del 2019
Todo parece indicar que este brote terminó. La E. coli es una causa importante de enfermedad en los Estados Unidos. Se puede encontrar más información sobre la E. coli y las medidas que las personas pueden tomar para reducir su riesgo de infección en la página web sobre la E. coli y la seguridad de los alimentos.
17 de diciembre de 2018
Los CDC, funcionarios reguladores y de salud pública de varios estados, Canadá y la FDA están investigando un brote multiestatal de infecciones por Escherichia coli O157:H7 (E. coli O157:H7) productora de la toxina de Shiga.
Hasta el 13 de diciembre del 2018, quince estados y el Distrito de Columbia habían notificado un total de 59 personas infectadas por la cepa de E. coli O157:H7 que causó el brote. En la página web del mapa de casos reportados se puede encontrar una lista de los estados y la cantidad de casos en cada uno.
Los casos de enfermedad comenzaron entre el 5 de octubre y el 16 de noviembre del 2018. La edad de las personas enfermas varía desde 1 hasta los 84 años, con una mediana de edad de 26. El sesenta y cinco por ciento de las personas enfermas son mujeres. De las 50 personas sobre las cuales hay información, 23 (46 %) fueron hospitalizadas, incluidas dos que presentaron síndrome urémico hemolítico (un tipo de insuficiencia renal). No se han notificado muertes.
Los casos de enfermedad que ocurrieron después del 21 de noviembre del 2018 podrían no haberse notificado todavía debido al tiempo que pasa entre el momento en que una persona se enferma con una infección por E. coli y el momento en que se notifica la enfermedad. Esto lleva, en promedio, 2 a 3 semanas.
Investigación del brote
Los hallazgos epidemiológicos, de laboratorio y de rastreo indican que la lechuga romana de las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California es una fuente probable de este brote.
En las entrevistas, las personas enfermas respondieron preguntas acerca de los alimentos que consumieron y otras exposiciones que tuvieron la semana anterior a que se enfermaran. Veintisiete (84 %) de las 32 personas entrevistadas dijeron haber comido lechuga romana. Este porcentaje es significativamente más alto que los resultados obtenidos en una encuesta [PDF – 787 KB] de personas sanas, en la cual el 47 % de las que respondieron reportaron haber comido lechuga romana la semana anterior a la que fueron entrevistadas. Las personas enfermas reportaron haber comido diferentes tipos de lechuga romana en varios restaurantes y en la casa.
La información de rastreo preliminar de la FDA indica que las personas enfermas en este brote comieron lechuga romana cosechada en las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California. La información adicional obtenida redujo el número de condados identificados en el rastreo. Con base en la evidencia disponible, las personas no deben comprar, servir, vender ni comer la lechuga romana de los siguientes condados de California: Monterey, San Benito y Santa Bárbara.
La FDA, junto con los CDC y socios estatales, está investigando las granjas y las instalaciones de refrigeración en California que fueron identificadas en el rastreo. Los CDC analizaron muestras de agua y sedimento de la granja Adam Bros. Farming, Inc. en el condado de Santa Bárbara, California, que fue una de las 8 granjas identificadas en el rastreo. La cepa de E. coli O157:H7 del brote se encontró en sedimentos dentro de un reservorio de agua para uso agrícola ubicado en la granja. Los resultados de la secuenciación del genoma completo mostraron que la cepa de E. coli O157:H7 que se encontró en el reservorio de agua para uso agrícola estaba muy relacionada genéticamente con la cepa de E. coli O157:H7 aislada de muestras de personas enfermas. La FDA continúa investigando para obtener más información sobre cómo la bacteria E. coli podría haber entrado en el reservorio de agua para uso agrícola y las maneras en que la lechuga romana de la granja se podría haber contaminado. La lechuga romana de la granja Adam Bros. Farming, Inc. ya no está disponible para la venta.
El trabajo de rastreo de la FDA parece indicar que otra lechuga romana que se envió de otras granjas también podría estar implicada en el brote. La FDA continúa la investigación.
Esta investigación sigue en curso y los CDC proporcionarán más información a medida que esté disponible.
11 de diciembre de 2018
Los CDC, funcionarios reguladores y de salud pública de varios estados, Canadá y la FDA están investigando un brote multiestatal de infecciones por Escherichia coli O157:H7 (E. coli O157:H7) productora de la toxina de Shiga.
Hasta el 6 de diciembre del 2018, quince estados habían notificado un total de 52 personas infectadas por la cepa de E. coli O157:H7 del brote. En la página web del mapa de casos reportados se puede encontrar una lista de los estados y la cantidad de casos en cada uno.
Los casos de enfermedad comenzaron entre el 5 de octubre y el 18 de noviembre del 2018. La edad de las personas enfermas varía desde 1 hasta los 84 años, con una mediana de edad de 30. El 69 % de las personas enfermas son mujeres. De las 45 personas sobre las cuales hay información, 19 (42 %) fueron hospitalizadas, incluidas dos que presentaron síndrome urémico hemolítico (un tipo de insuficiencia renal). No se han notificado muertes.
Los casos de enfermedad que ocurrieron después del 14 de noviembre del 2018 podrían no haberse notificado todavía debido al tiempo que pasa entre el momento en que una persona se enferma con una infección por E. coli y el momento en que se notifica la enfermedad. Esto lleva, en promedio, 2 a 3 semanas.
Investigación del brote
Los hallazgos epidemiológicos y de rastreo indican que la lechuga romana de las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California es una fuente probable de este brote.
En las entrevistas, las personas enfermas respondieron preguntas acerca de los alimentos que consumieron y otras exposiciones que tuvieron la semana anterior a que se enfermaran. Veinticuatro (83 %) de las 29 personas entrevistadas dijeron haber comido lechuga romana. Este porcentaje es significativamente más alto que los resultados obtenidos en una encuesta [PDF – 787 KB] de personas sanas, en la cual el 47 % de las que respondieron reportaron haber comido lechuga romana la semana anterior a la que fueron entrevistadas. Las personas enfermas reportaron haber comido diferentes tipos de lechuga romana en varios restaurantes y en la casa.
La información de rastreo preliminar de la FDA indica que las personas enfermas en este brote comieron lechuga romana cosechada en las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California. Específicamente, los condados de California que la FDA identificó en la investigación de rastreo son Monterey, San Benito, San Luis Obispo, Santa Bárbara, Santa Cruz y Ventura. Hasta el momento, no se ha identificado un productor, un proveedor, un distribuidor o una marca de lechuga romana en común.
La FDA, junto con los CDC y socios estatales, está investigando las granjas y las instalaciones de refrigeración en California que fueron identificadas en el rastreo. Los CDC recolectaron muestras de agua para hacer pruebas de detección de E. coli O157:H7; se está a la espera de estos resultados.
Esta investigación sigue en curso y los CDC proporcionarán más información a medida que esté disponible.
29 de noviembre del 2018
Los CDC, funcionarios reguladores y de salud pública de varios estados, Canadá y la FDA están investigando un brote multiestatal de infecciones por Escherichia coli O157:H7 (E. coli O157:H7) productora de la toxina de Shiga.
Hasta el 26 de noviembre del 2018, doce estados habían reportado 43 personas infectadas por la cepa de E. coli O157:H7 del brote. En la página web del mapa de casos reportados se puede encontrar una lista de los estados y la cantidad de casos en cada uno.
Los casos de enfermedad comenzaron entre el 8 y el 31 de octubre del 2018. La edad de las personas enfermas varía desde los 1 hasta los 84 años, con una mediana de edad de 25. El 69 % de las personas enfermas son mujeres. De las 38 personas sobre las cuales hay información, 16 (42 %) fueron hospitalizadas, incluida una que presentó síndrome urémico hemolítico (un tipo de insuficiencia renal). No se han notificado muertes.
Los casos de enfermedad que ocurrieron después del 31 de octubre del 2018 podrían no haberse notificado todavía debido al tiempo que pasa entre el momento en que la persona se enferma con una infección por E. coli y el momento en que se notifica la enfermedad. Esto lleva, en promedio, 2 a 3 semanas.
Investigación del brote
Los hallazgos epidemiológicos y de rastreo indican que la lechuga romana de las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California es una fuente probable de este brote.
En las entrevistas, las personas enfermas respondieron preguntas acerca de los alimentos que consumieron y otras exposiciones que tuvieron la semana anterior a que se enfermaran. Veintidós (88 %) de las 25 personas entrevistadas dijeron haber comido lechuga romana. Este porcentaje es significativamente más alto que los resultados obtenidos en una encuesta [PDF – 787 KB] de personas sanas, en la cual el 47 % de las que respondieron reportaron haber comido lechuga romana la semana anterior a la que fueron entrevistadas. Las personas enfermas reportaron haber comido diferentes tipos de lechuga romana en varios restaurantes y en la casa.
La información de rastreo preliminar de la FDA indicó que las personas enfermas en este brote comieron lechuga romana cosechada en las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California. Hasta el momento, no se ha identificado un productor, un proveedor, un distribuidor o una marca de lechuga romana en común. Los CDC están recomendando que los consumidores no coman, y que los restaurantes y minoristas no vendan ningún tipo de lechuga romana de las regiones de cultivo de la costa central del norte y del centro de California.
Esta investigación sigue en curso y los CDC proporcionarán más información a medida que esté disponible.
23 de noviembre del 2018
Los CDC, funcionarios reguladores y de salud pública de varios estados, Canadá y la FDA están investigando un brote multiestatal de infecciones por Escherichia coli O157:H7 (E. coli O157:H7) productora de la toxina de Shiga.
Los investigadores de salud pública están usando el sistema PulseNet para identificar los casos de enfermedad que pueden ser parte de este brote. PulseNet es la red nacional de subtipificación de los laboratorios de agencias de salud pública y agencias reguladoras de los alimentos, coordinada por los CDC. La identificación genética se realiza en las bacterias E. coli aisladas de personas enfermas usando técnicas llamadas electroforesis en gel de campo pulsado (PFGE, por sus siglas en inglés) y secuenciación del genoma completo (WGS, por sus siglas en inglés). La red PulseNet de los CDC administra la base de datos nacional de estas huellas genéticas a fin de identificar los posibles brotes. La secuenciación del genoma completo da una huella genética más detallada que la electroforesis en gel de campo pulsado. La secuenciación del genoma completo realizada en bacterias E. coli de personas enfermas en este brote mostró que las cepas estaban muy relacionadas genéticamente. Esto significa que las personas enfermas tenían más probabilidades de tener una fuente en común de infección.
Hasta el 20 de noviembre del 2018, once estados han reportado 32 personas infectadas por la cepa de E. coli O157:H7 del brote. En la página web del mapa de casos reportados se puede encontrar una lista de los estados y la cantidad de casos en cada uno.
Los casos de enfermedad comenzaron entre el 8 y el 31 de octubre del 2018. La edad de las personas enfermas varía desde los 7 hasta los 84 años, con una mediana de edad de 24. El 66 % de las personas enfermas son mujeres. De las 26 personas sobre las cuales hay información, 13 (50 %) fueron hospitalizadas, incluida una que presentó síndrome urémico hemolítico (un tipo de insuficiencia renal). No se han notificado muertes.
Los casos de enfermedad que ocurrieron después del 30 de octubre del 2018 podrían no haberse notificado todavía debido al tiempo que pasa entre el momento en que la persona se enferma con una infección por E. coli y el momento en que se notifica la enfermedad. Esto lleva, en promedio, 2 a 3 semanas.
Investigación del brote
Los hallazgos epidemiológicos indican que la lechuga romana es una fuente probable de este brote.
En las entrevistas, las personas enfermas respondieron preguntas acerca de los alimentos que consumieron y otras exposiciones que tuvieron la semana anterior a que se enfermaran. Once (79 %) de las 14 personas entrevistadas dijeron haber comido lechuga romana. Este porcentaje es significativamente más alto que los resultados obtenidos en una encuesta de personas sanas, en la cual el 47 % de las que respondieron reportaron haber comido lechuga romana la semana anterior a la que fueron entrevistadas. Las personas enfermas reportaron haber comido diferentes tipos de lechuga romana en varios restaurantes y en la casa.
La secuenciación del genoma completo mostró que la cepa de E. coli O157:H7 aislada de muestras de personas enfermas en este brote está muy relacionada genéticamente con la cepa de E. coli aislada de muestras de personas enfermas en el brote del 2017 vinculado a verduras de hoja verde en los Estados Unidos y a lechuga romana en Canadá. El brote actual no está relacionado con otro brote multiestatal reciente de infecciones por E. coli O157:H7 vinculado a la lechuga romana. Las personas que se enfermaron en el brote de la primavera se habían infectado con bacterias E. coli O157:H7 con una huella genética diferente.
La FDA y los estados están trabajando para rastrear el origen de la lechuga romana que comieron las personas que se enfermaron en este brote. Hasta el momento, no se ha identificado un productor, un proveedor, un distribuidor o una marca de lechuga romana en común. Los CDC están recomendando que los consumidores no coman ningún tipo de lechuga romana, y que los restaurantes y minoristas no la vendan, hasta que sepamos más sobre este brote y la fuente de la lechuga contaminada.
Esta investigación sigue en curso y los CDC proporcionarán más información a medida que esté disponible.